Anoche mientras hablábamos entendí muchas cosas. Qué bien me conoces, como sabes medirme, apretar y soltar en el momento adecuado.
Anoche, fuiste compañera y amiga, amante y amada en el mismo instante, supiste poner las palabras justas en el hueco necesario, hablaste como creo que no le habías hablado a nadie y me hablaste como no me había hablado nadie.
Anoche, tus brazos fueron más que nunca el descanso del guerrero.
Anoche, te quise más que nunca.
De noche todo es mas fácil, de noche la complicidad se cuela en nuestra cama, somos tres y el trio funciona. De noche, él.
ResponderEliminarJodo pues espero que no seas tu porque sino vaya disgusto se va a llevar la pobre...
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