jueves, 11 de junio de 2009

Tutankhamon El Faraón Borrado



La historia del faraón es de las más intrigantes de la egiptología, apenas se encuentran vestigios que nos aclaren su vida, su muerte, su ascendencia o su descendencia.
El heredero al trono después de su muerte, su enemigo, se encargó de borrar al faraón. Mando destruir los sellos reales de las estatuas, incluso del propio sarcófago.
Su intención era hacer desaparecer al faraón, al niño que había sido rey a los 8 años y llevado a Egipto a su época más brillante y más gloriosa arquitectónica y económicamente ( salvando el periodo de Ramsés II)
¿Qué le pasó al faraón?
¿Fue un asesinato?
La última autopsia realizada a la momia ha descubierto una lesión craneal de origen desconocido. Los egiptólogos descartan la teoría del asesinato y lo atribuyen a un accidente de caza.
El faraón salía a cazar con regularidad, nos trasladamos a la escena, viajando en el carro a una velocidad excesiva pudo saltar alguna piedra del terreno y golpearle haciéndole caer del carro.
Seguramente los datos de su muerte se hubieran conservado si su enemigo no hubiera decidido borrar su presencia de la historia.
El valle de los Reyes escavado y explorado plenamente había dejado latiendo bajo su suelo la tumba del faraón. Cuando tras dividir metro a metro y durante 5 años el valle de los Reyes buscándolo, hallaron por fin la tumba. Tutankhamon salió a la luz. Y se convirtió en el faraón más famoso de todos, su tumba olvidada, fue la única abierta sin que los saqueadores de tumbas ingleses hubieran tocado nada antes, se llegó a la momia en perfecto estado.
El faraón borrado paso a ser el faraón más conocido, lo que es para su enemigo una auténtica ironía.
* Fotografía tomada en la exposición La tumba de Tuthankamón ( Barcelona, Junio 2009)